Algunos creen que las comparaciones suelen ser odiosas, sobre todo cuando se hace entre personas. No sé si el asunto cambia cuando dicha comparación se hace entre ciudades. En lo personal creo que es un mecanismo útil para establecer algunos parámetros, aunque siempre la comparación se quede corta en incluir las incontables variables que definen una u otra realidad. El arquitecto Álvaro González Clare escribió un interesante artículo partiendo precisamente de la comparación entre dos importantes urbes latinoamericana: Bogotá y Ciudad de Panamá. A la primera la considera ejemplo y referencia en el manejo de la movilidad y el incremento de la calidad de vida. De la segunda le preocupa el destino sobre todo ante el apabullante mercado inmobiliario. Comparación Urbana…Así se llama el escrito en cuestión. Le invito a leerlo y comentarlo. Las fotos muestran a Bogotá, arriba, y a Ciudad de Panamá.
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